Baja California es una de las principales entradas al continente americano, por lo que el sector turístico es uno de los más importantes, siendo Ensenada uno de los destinos favoritos debido a su gastronomía, la viticultura y sus espacios naturales.
Aunque su zona urbana es pequeña comparado con Tijuana o Mexicali, en materia turística su vocación es amplia, ya que además del sector viticultor, cuenta con actividades de ecoturismo, pesca deportiva, aventura, camping, carreras off road, surfing y otras que se benefician de un clima tipo mediterráneo la mayor parte del año.
Dentro de la zona urbana, lo más visitado por los turistas que llegan vía terrestre o en crucero, están el malecón, el Mercado Negro, los pequeños puestos de comida urbana, Ventana al Mar y hacer compras de productos locales por el conocido bulevar Costero y la calle Primera, unas de las principales para el sector.
Al ser el municipio más grande de Baja California, tiene espacios magníficos que aportan al estado un importante porcentaje económico, uno de ellos el enoturismo gracias a la Ruta del Vino y la Antigua Ruta del Vino donde residen más de cien productores industriales y artesanales, quienes elaboran alrededor del 90% del vino de todo el país y, de hecho, fue denominado como “Capital del Vino Mexicano”.
En cuestión de turismo naviero, Ensenada representa uno de los puertos más importantes, pues tan sólo en 2018 se generó una derrama de 34 millones de dólares, según cifras del Gobierno de Baja California. En 2019 arribaron 275 cruceros, lo cual se vio afectado por la restricciones que trajo al mundo la pandemia de COVID-19.
Los turistas buscan a Ensenada por su clima, su cercanía con Estados Unidos, pero sobre todo por su gastronomía y su fusión de numerosos ingredientes locales gracias a la creatividad de las cocinas restauranteras y las carretas de comida urbana.
En la zona de Ojos Negros, en la delegación Real del Castillo, existen numerosos productores de queso artesanal y pan rústico, por lo que es uno de los sitios que deben ser visitados, además que en invierno se vuelve un paisaje digno de fotografiarse.
Justamente desde el 2015, es parte de la Red de Ciudades Creativas de la UNESCO, con lo que se promueve la diversidad cultural y el desarrollo sostenible de 180 que forman parte mediante siete temáticas, una de éstas la gastronomía.
Otro rubro que representa buenos números en la vocación turística de este puerto norteño, son las carreras fuera de camino, donde cada año se llevan a cabo al menos doce eventos de su tipo como la Baja 1000, la Baja 500 y la Lucas Oil Series.
Ese tipo de eventos deportivos le dan a Ensenada una importante derrama económica, cobertura de medios internacionales y la participación de equipos de Estados Unidos, España, Catar, Argentina, Italia, México, Japón y Chile.

Naturaleza y turismo de aventura
Parte del paraíso turístico de Ensenada, son las actividades relacionadas al mar, como son la pesca deportiva, el kayak, el buceo y las excursiones para el avistamiento de ballenas, fenómeno que se da de diciembre a marzo, por lo que cientos de visitantes llegan cada año para disfrutar de todo eso.
En cuestiones de surf, Ensenada cuenta con diversas playas que son de las favoritas de quienes practican ese deporte, ya sean locales o foráneos, como es Playa Mona Lisa, Estero Beach, San Miguel, Tres Emes y Stacks y para kayaking, las favoritas son La Misión, La Joya, Bahía de los Ángeles y San Luis Gonzaga.
Para el turismo de aventura y camping, existen dos parques nacionales en San Pedro Mártir y Sierra de Juárez, sitios sumamente atractivos para distintas actividades ya para grupos de amigos o familias.
Algunas son observar las estrellas, tomar fotografías, hacer campamentos, senderismo, ciclismo de montaña o conocer la flora y fauna, aunque para ello es necesario revisar la condición climática y consultar con los directivos de cada parque para saber si están abiertos al público.
Finalmente, La Bufadora, es un géiser marino ubicado a 35 km de la ciudad de Ensenada. Se trata de un fenómeno donde el agua es expulsada de las rocas costeras y alcanza bastantes metros de altura por lo que llega a caer encima de los turistas.